El persistente aumento de las temperaturas en el planeta, podrían provocar migraciones masivas a niveles sin precedente. Cientos de millones de personas podrían verse obligadas a desplazarse debido a la escasez de agua y a la falta de alimentos. La mayor parte de África, centro y sur de Asia y sur de América, son las zonas desde las que podrían surgir estas migraciones.
Por otro lado, el incremento del nivel de los océanos será devastador en las zonas costeras del sur de Asia, en las islas del Pacífico Sur, en el Caribe, y en otras muchas zonas del mundo, donde las casas quedarán sumergidas.
Los Africanos del norte y oeste del continente podrían emigrar hacia Europa, mientras que la frontera del sur de los Estados Unidos, soportaría una mayor presión por parte de las migraciones procedentes del centro de América.
La Conferencia de las Naciones Unidas ha alertado a este respecto y ha advertido que el mundo debe prepararse para movimientos de personas masivos, debido al cambio climático. Según el Tratado de la Convención de Ginebra de 1951, los refugiados son personas que escapan por ser perseguidos por su estado. Un acuerdo que no incluye migraciones por cambios climáticos. Sin embargo, se está presionando para que la comunidad internacional cambie su teoría y se prepare para ayudar a los millones de desplazados previstos.